Los 10 mejores bulbos que te hacen feliz
¿Ya los conoces, los bulbos que crecen bien como bulbo en maceta en casa? Te los presentamos.Probablemente ya conozcas el narciso amarillo, pero también hay narcisos blancos, rosados y bicolores.
2. Jacinto
Este bulbo está disponible en varios colores y todos difunden una fragancia de primavera. Pruebe algo nuevo y elija la variante de flor doble o la de multiflora.
3. Tulipán
Cuando pienses en la primavera, piensa en tulipanes. A partir de abril se florecen en el jardín, pero como bulbo en maceta puedes disfrutarlos mucho antes. Al igual que la rosa, cada tulipán tiene su significado.
4. Crocus
Al final del invierno, el crocus aparece fuera del suelo. También aprecian estár en una maceta en casa. El crocus está disponible en muchos colores, por lo que hay algo para todos.
5. Nazareno
El color de las flores es en general azul, pero hoy del día hay especies de color blanco. Tiene un olor agradable que se refiere al nombre científico: Muscari. ¿Sabías que esta planta también es apreciada por sus cualidades sabrosas y medicinales?
Las deliciosas flores de este bulbo son azules o blancas con un corazón amarillo.
7. Iris
Con sus flores intensamente azules, estos bulbos llaman la antención, porque hay pocas plantas con este color profundo. El iris también está disponible en blanco y morado.
8. Convallaria
Este bulbo emana una muy buena fragancia de primavera. Esto, combinado con sus flores románticas, hace que la Convallaria es un verdadero campeón de primavera.
9. Fritilaria
Bonito nombre, ¿verdad? La planta con flores amarillas, blancas o moradas parece bastante frágil, pero este bulbo en maceta es más fuerte que piensas.
10. Galanthus nivalis
El galanthus ya está disponible en enero y febrero y es de color blanco.


¿Sabías que?
Bulbos necesitan pasar un período de frío para florecer. De forma natural, las flores de estos bulbos surgen de marzo a mayo después de haber soportado los meses de invierno enterrados en el jardín. Para conseguir que florezcan en febrero los viveristas tienen que engañarlos: primero someten a los bulbos durante algunas semanas a temperaturas que oscilan entre los cinco y los 10º; a continuación los plantan en tiestos y los llevan a los invernaderos, donde son forzados, es decir, expuestos a temperaturas considerablemente más altas. Así, sintiendo que la primavera ha llegado, los bulbos salen anticipadamente de su letargo y emiten sus varas florales en pleno invierno.